jueves, 24 de marzo de 2011

PRISIONEROS DE NUESTROS FANTASMAS.

     La persona que me enseñó mis primeras nociones de fotografía decía que un buen fotógrafo es aquel que es capaz de expresar con una sola imagen todo aquello que quiere decir (si necesita dos imágenes para ello, es que algo está haciendo mal...).

     No sé si ésta es una verdad absoluta en el mundo de la fotografía, o si sólo era su forma de entender la valía de un artista de la cámara. El caso es que yo rara vez me expreso con una sola imagen, aunque quizás también sea porque lo que yo suelo hacer es "contar historias" y para ello necesito varias, ...

     Éstas las he rescatado de un pasado ya lejano y, para mi sorpresa, me he dado cuenta de que aún siguen teniendo vigencia.



                                    

                                        
                                                    
                                                       

     Estas fotos las hice hace más de diez años con una cámara analógica, cargada con un carrete en blanco y negro, que revelé yo misma y posteriormente positivé.

     En aquel momento mi propósito era uno bien claro: quería poner de manifiesto de forma simbólica algo que estaba sucediendo bastante a menudo: mujeres que eran víctimas de maltrato por parte de sus parejas rara vez los denunciaban y, si lo hacían, poco después retiraban la denuncia y regresaban con sus agresores.

     Para mí, que entonces era una cría y bastante idealista, me resultaba claro que las mujeres que se hallaban en estos casos querían salir de ellos (foto 1).
     Pero dado que en ese momento, había una diferencia importante entre hombres y mujeres y unos reducidos derechos de éstas en muchos ámbitos,  unido al hecho de que eran educadas básicamente para desempeñar el papel de sostenedoras de esta institución tan importante como es la familia, ellas aceptaban ese tipo de situaciones(foto 2) .
     Y, acababan sufriendo (fotos 4 y 5), bien una muerte lenta, por vivir una situación que no sólo no las hacía sentir felices, sino que además les hacía daño,  bien una muerte anticipada a manos de su agresor o bien interna porque ése que las hacía sentir tan mal, las dejaba (foto 3) y era como si perdiesen el centro de su universo...

       Lo desconcertante es que hoy en día en que ha cambiado tanto la sociedad, y el rol de la mujer en ésta, sigue persistiendo el problema, ¿por qué?.

         Se me ocurre que, debido a que  las relaciones interpersonales son muy complejas, y que no hay una relación igual a otra,  a veces  esta situación se mantiene por no tomar una decisión a tiempo, y otras porque, aunque sí se haya hecho, después por motivos internos de las personas involucradas, se acaba concediendo una segunda oportunidad: quizás por creer que, a pesar de todo, aún se sigue amando al otro y se tiene la ingenua esperanza de que ese amor será suficiente para conseguir ayudarle a cambiar; o simplemente creer que el otro puede cambiar por sí mismo, o quizás por otros motivos que se consideran lo suficientemente importantes, ...

       Lo más curioso es que esto mismo ocurre con otras muchas cosas y en otros muchos ámbitos (tanto a hombres como a mujeres): las cosas que nos perjudican (tanto a hombres como a mujeres)  intentamos erradicarlas, pero a veces, a pesar de saber que con ello hemos conseguido algo positivo para nosotros mismos, sentimos como un deseo de seguir teniéndolas o de seguir viviéndolas, y además un vacío que es como una pequeña muerte de algo dentro de nosotros, ...

      Bueno, ahí os dejo esa reflexión, ...

      Y, cambiando de tema y volviendo a este trabajo fotográfico como tal, recuerdo que, después de montar las fotos y colocarlas una junto a otra, me di cuenta de que así creaba una historia, pero que, si hubiese decidido poner cada una en un lugar diferente, intercalada con la de otros compañeros de exposición, cada una de ellas hubiese tenido sentido por sí misma (no el mismo que formando parte del conjunto, pero sí habrían podido verse de forma individual, y tener su propia interpretación).                                                 
                                                    
                                        
                                             
                                                           
                                                                                   
                                                                                                                                                                                                     
     
      Y ahora quisiera comentaros algo anecdótico: las fotos que aparecen en esta entrada, formaron parte de una exposición colectiva, y, se esperaba que la que más se comentase  fuese ésta:
                                                                                           
                                                                                                   
                                                                                                                  
     Pero no fue así. Curiosamente, quien fue a ver esa exposición, salía comentando lo mucho que  le había gustado y al tiempo impresionado esta otra:



     En ese momento, yo no lo entendí, pero la vida me ha enseñado, que esa gente tenía razón.



viernes, 18 de marzo de 2011

UN HUECO EN ESTE NUEVO ESPACIO

     Debido a problemas técnicos me he visto obligada a exportar el blog inicial, porque las opciones que se me ofrecían no me servían para continuar con la trayectoria que yo quería seguir.



     Aunque todos sentimos, si no miedo, al menos sí una cierta inquietud cuando tenemos que enfrentarnos a un cambio, yo he decidido aprovechar éste, para hacer algo que no hice al principio: dar la bienvenida a todas aquellas personas que visiten el blog por primera vez y pedir a aquellas que ya lo hicieron en su anterior ubicación, que sigan , si lo desean,  acompañándome en mi recorrido, ...

     Y a todos, deciros que mi puerta siempre está abierta a cualquier sugerencia, crítica, o comentario que queráis hacer, porque, en realidad ése es el objetivo de este blog: expresar ciertas ideas que voy adquiriendo y compartirlas para que así, quien quiera, pueda matizarlas, enriquecerlas, discutirlas o rebatirlas porque considera que son erróneas -porque, como ya dije, siento la necesidad de expresar ciertas cosas que, en un momento dado, creo haber comprendido... pero eso no significa que, a pesar de que, en ese momento yo crea que son ciertas, no esté total y absolutamente equivocada-.

     Y, como soy una optimista empedernida, espero de este nuevo espacio que tenga un hueco para mí, y para todo aquel que decida pasar por aquí y quiera también un huequecito en él (siempre que quiera, claro).




jueves, 10 de marzo de 2011

ENTRE BRUMAS DE TRASTIENDA

     Alguien me ha comentado que, tras leer el título del blog, no ha conseguido hacerse una idea de lo que puede encontrar en él.

     ¿Por qué "Entre brumas de trastienda"?. Pues porque así es como me siento yo: igual que le ocurre a quien entra en una trastienda donde la bombilla no funciona y sólo cuando se filtra un pequeño rayo de luz puede ver, con mayor o menor nitidez, algo de lo que hay en ella.

Eso me pasa a mí en relación con el ser humano.

Siento una bruma ante mí que me impide entender muchísimas cosas de él -de mí misma, como parte de él-. Y, a veces, hay algo de las acciones, reacciones, emociones que sentimos que, de repente, consigo ver con mayor o menor claridad, y siento la necesidad de plasmarlo de alguna manera.

     Y, como no voy con la cámara en ristre a todas partes, esa idea más o menos intuitiva, más o menos cercana a la verdadera realidad que he llegado a captar, la plasmo en imágenes, normalmente simbólicas -sobre todo si se trata de un tema difícil de tratar, porque creo que no es necesario mostrar determinadas cosas de forma cruda, cuando se pueden entender perfectamente de otra manera menos dura-.

     Es mi forma de relacionarme con la fotografía... Yo no me considero "fotógrafa", sino solamente una persona que hace fotos para expresarse.
Me gustan todo tipo de fotografías -paisajes, retratos, reportaje, fotografía surrealista, bodegones, ...  -, pero yo soy incapaz de mostrar alguna imagen donde no aparezca al menos una persona, ...

     Generalmente será mediante una foto, o varias, como intentaré tratar un tema concreto, pero, a veces, usaré para ello imágenes en consonancia con una música y una letra (un video) -como ocurrió en la entrada anterior-.

      Y como creo que funciona muy bien eso de que "para muestra un botón", pues ahí voy...



   Me contaron la historia de una chica que se trasladó de la ciudad donde vivía, a un pueblo -grande, pero pueblo en definitiva-.

    Esta chica tuvo un niño, y, como, tanto las calles como las aceras, eran muy estrechas, decidió que, en lugar de sacar de paseo a su niño en el típico cochecito de bebé, lo iba a hacer metidito en una mochila que colgaba de sus hombros: de ese modo, si se encontraba cansado se podía apoyar en el cuerpo de ella, y si estaba activo, tenía espacio para mirar lo que había a su alrededor.

     Años más tarde, cuando ya se relacionaba con las demás madres, en cumpleaños y otro tipo de reuniones, una de ellas le dijo, que la conocían desde que su niño era un bebé porque les llamó mucho la atención su forma de relacionarse con él, y la llamaban "la mamá hippie"...

     Ella paseaba a su niño todos los días por lugares diferentes, pero siempre acababa en un parque que le gustaba mucho, porque estaba especialmente equipado para niños chiquitines y, además, tenía bastante vegetación.

     Al principio, miraba cómo las demás madres hablaban de sus cosas, se reían, ... cómo los niños corrían, jugaban, ... Pero llegó un momento en que ya todo eso no le llamaba la atención, y se concentró totalmente en su bebé: le hablaba, le cantaba, le hacía sonreír, le mostraba lo que había alrededor -las hojas caídas en otoño, los pajarillos posados que luego alzaban el vuelo, las nubes, ...-, y se balanceaba en el columpio con él encima, mientras le miraba y le hacía cariñitos. Lo que ocurría a su alrededor dejó de tener importancia.

     Lo curioso del caso es que todas las mamás y papás son (sois, somos) como esta "mamá hippie" ... Porque todo aquel que tiene un bebé, hace lo que sea necesario para que sea feliz, chorradas incluidas, sin importarle lo que pueda pensar la gente que pueda estar mirando, ...
Porque cuando su bebé sonríe, da igual la forma en la que el mundo gire.